PROPIEDADES Y USOS DEL AMIANTO

PROPIEDADES Y USOS DEL AMIANTO

Amianto o asbesto es el término genérico con el que se denomina a un conjunto de minerales naturales (silicatos hidratados de composición química variable) que cristalizan en forma de fibras con características específicas muy apreciadas para diversos usos que se han explotado en diferentes productos.

La industria del amianto data de finales del siglo XIX, cuando comenzaron las explotaciones  de los grandes yacimientos rusos y canadienses.

Sus excelentes propiedades físicas y químicas, tales como: su resistencia al fuego; su baja conductividad térmica, eléctrica y acústica; su buena resistencia mecánica y resistencia a la acción de productos químicos; gran elasticidad y la posibilidad de ser hilado, etc., le conferían un valor único que no poseía ningún otro material natural o inventado por el ser humano.

VARIEDADES:

Las principales variedades del amianto pueden clasificarse en dos familias distintas dependiendo de su estructura cristalina: la serpentina y los anfíboles.

El crisotilo, o amianto blanco, pertenece al grupo de la serpentina, mientras que el resto (la crocidolita (amianto azul), amosita o amianto marrón, antofilita, tremolita y actinolita) son anfíboles.

Industrialmente, las variedades mineralógicas que más se han usado han sido el crisotilo, la crocidolita y la amosita.

El crisotilo, ha sido la variedad más utilizada y más abundante (95% de la producción mundial). Es el más blando y presenta gran facilidad para hilarse o tejerse. Posee una estructura de capas que se enrollan en tubos concéntricos con su eje más largo paralelo a la fibra; sus fibras son largas, flexibles y curvadas.

USOS:

Una de sus utilidades más importantes fue la fabricación de fibrocemento, para la realización de placas y canalizaciones, ya que la fibra de amianto confería al cemento resistencia y ligereza.

El uso del amianto se ha ido restringiendo progresivamente, y desde el 14 de junio de 2002 ningún proceso industrial puede utilizar amianto como materia prima y tampoco se pueden vender o adquirir productos con amianto.

Los trabajos en los que va a existir riesgo de exposición al amianto no son en la actualidad los de fabricación, sino los de desmontaje, demolición, mantenimiento y reparación de todos aquellos edificios, instalaciones, medios de transporte o equipos donde se encuentre instalado el amianto en cualquiera de las formas que se han mencionado.

Estos materiales cuando se rompen o se trocean producen un gran número de fibras flexibles que pueden penetrar en las vías respiratorias. Si las fibras de amianto sólo están débilmente ligadas en el producto o material y éste se desmenuza fácilmente (amianto friable), el riesgo de que se liberen fibras es alto.

Por lo tanto, el amianto friable siempre debe ser retirado o cubierto. Las aplicaciones más utilizadas son amianto proyectado, cordones, juntas, paneles aislantes y prendas ignífugas.

Sin embargo, si las fibras están firmemente ligadas en un material no friable, es menos probable que se produzca la liberación de fibras. La aplicación más conocida es el fibrocemento en forma de placas onduladas.

También hay otras aplicaciones muy extendidas como canalones, depósitos o baldosas de vinilo.

Cuando este tipo de amianto está en buen estado existe menos riesgo para la salud.

Muchos de los materiales que contienen amianto liberan fácilmente fibras al ser manipulados o fragmentados.

Estas fibras liberadas se mantienen en suspensión durante un tiempo y luego se depositan en el suelo o en otras superficies.

Debido a su forma y escaso peso, cualquier corriente de aire, como la que producen las personas al moverse, hace que las fibras sedimentadas vuelvan a ponerse en suspensión.

Todos estos movimientos y sucesivas sedimentaciones y suspensiones de las fibras favorecen la división y subdivisión de las fibras, lo que va aumentando su concentración en el ambiente.

Estas fibras son invisibles al ojo humano y, cuanto más finas sean, más posibilidades hay de que se mantengan en suspensión y de que puedan ser respiradas por las personas que trabajen o frecuenten ese ambiente.

INFORMACION Y CONTACTO PARA LA RETIRADA DE AMIANTO:

GMADC, SL. E-mail: info@gmadc.com - TELF/FAX: 957 756095 – MOVIL 696660007.